Comienzo de martes caliente...
Lo he visto esta mañana, nuestras circunstancias actuales no nos dejan estar juntos siempre que queremos. Estaba allí parado esperándome, distraído, me he acercado hasta a él, abrazándolo y a modo de buenos días he besado sus labios que tanto he añorado… nada más sentir el primer roce, mi cuerpo ha reaccionado y el deseo me ha invadido por completo. Cuando me rodea con sus brazos y sus labios se unen a los míos, no puedo hacer más que suspirar de deseo, si no fuese por el lugar, allí mismo hubiese ido a más. Abrazándome por la cintura, hemos ido dando un paseo hasta la oficina, durante el trayecto, ya escogido con poco paso de gente a propósito, no han parado los besos, las caricias, sus manos metiéndose por debajo de mi blusa acariciando mis pezones, deseosos de que fuese su boca la que los estuviera lamiendo y mordiendo… Pero no se queda ahí… colocándome contra la pared y con todo el disimulo del mundo, se ha colado por mi falda y apartando el biquini, durante unos instantes ha hecho...