Eternity... sigues en mi pensamiento...

Es una mirada y sensaciones convertidas en persona...
Romper con todo lo que pensaba y sólo dejarme llevar...
Es conversación inteligente, mago de las palabras, único en su especie...

Es transformación en hombre pasional donde los haya, es capaz de demostrarme que las caricias de un hombre, pueden ser tan sensuales o más como las caricias de una mujer... Cerrar los ojos y dejarse acariciar por él, es dejarse llevar a un mundo de sensaciones casi indescriptibles... es sentir y saborear cada segundo, marearse de placer y deseo...
Sus ojos cuando me miran, cuando me besan, sus brazos cuando me rodean mientras me besa, sus labios en los míos fuente inagotable de placer... su placer que es el mío...

Sus risas y la mía base de todo lo demás, su complicidad con la mía, el haber llegado a ese punto en el que me siento única con él, porque así me hace sentir... charlas interminables compartiendo una comida... un buen vino... una cena y unas risas... mirarme en sus ojos brillantes... reír con él, hablar con él, besar sus labios...

Aprender de él... debatir sobre que es la sensualidad...
¿que es la sensualidad, sino una exaltación sublime de los sentidos?
Y que provoca su compañía... sino la exaltación de dichos sentidos...
He de reconocerlo, amante y amigo, cómplice y seductor, hasta profesor en materias que redescubro a su lado... no me canso de aprender de él...
Sentir, vivir, aislarse... fantástica, acertada, aquella noche entre tantas personas y algo nuevo, él por supuesto. Tuvo que pasar el tiempo, los días, para que el juego continuara... pero continuó, y aquí estoy escribiendo de nuevo sobre él... tema reiterativo... pero... si esto se considera un ‘diario’, él forma parte de mi día a día, su recuerdo es ternura, su recuerdo es risa... su realidad es viva y pasional...
Me raptó del devenir de mis días, ausencia en el mundo sólo para él, su risa es la puerta del Castillo, su mirada las luces que dentro de el me retienen...

Serio caballero, dialogador incansable, racional y “controller”, aunque en instantes desaparece el control y la pasión lo inunda de tal forma que ahí está... aquí me tiene y me tendrá...
Detener el tiempo con él es magia... intentar que los minutos no corran, que las manecillas del reloj se detengan... volver a casa con él, y saber, sentir que han sido horas irrepetibles... Eternity me sigue acompañando....

Sabes? Te adoro... Y esa imagen me recuerda a uno de nuestros lugares preferidos donde nos escapábamos del mundo...

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